La consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Silvia Clemente, ha señalado que es una "magnífica iniciativa" la proposición de que la apicultura sea declarada Patrimonio de la Humanidad.
La responsable del primer sector en la comunidad autónoma ha apuntado que es "un buen momento" para plantear esta iniciativa porque la Unesco está apoyando ahora en mayor medida la declaración de bienes inmateriales "más ligados a la tradición y a la cultura".
Para alcanzar el propósito, ha avanzado que se pondrá en contacto con la Consejería de Cultura de la administración regional, quien, a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural, puede dar mayores apoyos a la medida
De conseguir este objetivo, se aportaría a los trabajos de la miel "el valor que no tiene desde el punto de vista cuantitativo pero sí de importancia", porque aporta empleos y economía positiva en zonas desfavorecidas al tiempo que contribuyen en la sostenibilidad del ecosistemas gracias a la polinización.
Asimismo, ha resaltado que la apicultura debería estar en el "primer pilar" de la Política Agraria Común (PAC) una vez que ha conseguido una mayor profesionalización en el país, que es uno de los cinco países de la Eurozona que explotan el trabajo en las colmenas.
"La transformación de la miel desempeña un importante papel en Castilla y León", ha apuntado la consejera, quien ha explicado que es la segunda comunidad autónoma con mayor exportación de este producto, solo por detrás de la Comunidad Valenciana.
Actualmente, el 27 por ciento de la miel que se vende fuera de las fronteras del país procede de las colmenas de Castilla y León, facturando unos 17 millones de euros. Del conjunto de la región, Salamanca acoge el 50 por ciento de las explotaciones con una media de 550 colmenas por cada profesional de la provincia.
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